Por Agustín Valdez
Galardonada con el premio Herralde de Novela 2019, Nuestra parte de noche consagra a Mariana Enríquez como una de las más importantes escritoras argentinas contemporáneas. La autora es ya un nombre conocido en el panorama literario de nuestro país desde hace varios años, dueña de un estilo donde el gótico anglosajón y la literatura fantástica rioplatense se cruzan dando lugar a algo verdaderamente único. Sus libros de cuentos Las cosas que perdimos en el fuego (2016) y Los peligros de fumar en la cama (2012), entre otras obras, demuestran su originalidad y destreza narrativa.
Los relatos de Enríquez construyen microuniversos ficcionales en los que conviven fantasmas, brujería, asesinos seriales y otros tópicos habituales del género de terror con problemáticas bien de nuestro mundo, como la depresión, los vínculos enfermizos, la violencia institucional o los femicidios. En su última obra Nuestra parte de noche todas sus obsesiones e intereses ya delineados en sus libros anteriores se combinan en una obra monumental, de más de 600 páginas, pero cuya lectura resulta atrapante e imposible de abandonar.
La novela transcurre en distintas épocas y lugares, pero fundamentalmente en Argentina e Inglaterra, en un recorrido que va desde los años sesenta hasta mediados de los noventa. En los años finales de la última dictadura militar, Juan, un hombre joven y viudo, viaja con su pequeño hijo Gaspar por las selváticas rutas del litoral hasta Misiones. Allí los aguarda la familia materna del niño, sin su madre, que ha fallecido recientemente en un misterioso accidente. Sin embargo, tanto Juan como su familia política no son personas corrientes, sino miembros de un grupo ocultista ancestral: “La Orden”. Mediante elaborados rituales, que incluyen torturas y muertes espeluznantes, los médiums de la misma se comunican con la Oscuridad, en busca del secreto de la vida eterna.
Todo esto no es, sin embargo, gratuito, ya que los médiums sufren de una degeneración progresiva de sus mentes y cuerpos. Mientras Juan agoniza, producto de años de rituales, la Orden se prepara para reemplazarlo con su hijo Gaspar, a quien su padre intentará proteger a toda costa de ese cruel destino. Este es el punto de partida para una historia fascinante que abarca varias décadas en las que veremos a los personajes surgir, desaparecer, crecer y transformarse, envueltos siempre en situaciones ominosas y aterradoras. Desapariciones, cámaras de tortura, monstruos de otras dimensiones, mentes quebradas por la locura, todos estos elementos sobrenaturales y humanos se articulan en una narración llena de crueldad y sadismo.
Enriquez logra con su novela intrigar y dejar al lector siempre con ganas de más. La construcción de los personajes es sólida y la ambientación hace realmente creer que por momentos que se transita por la Londres psicodélica de los ‘60 o por la ciudad de La plata de los años menemistas. Los temores y preocupaciones de las épocas, como los desaparecidos, el sida, la crisis económica, se entrecruzan con los horrores místicos y fantasmales.
Sin embargo, al igual que en otras de sus obras, la autora trasciende el terror para explorar también la complejidad de las relaciones humanas: la amistad, el amor, los mandatos familiares, todo bajo una óptica despojada de moralismos y con un fuerte cuestionamiento a lo patriarcal. Aparecen personajes gays, andróginos, mujeres rebeldes y toda la atmósfera general de la obra está dotada de un gran espíritu queer. La oscuridad está presente de distintas formas en los vínculos, en las mentes de Gaspar, Juan, Adela, Rosario, Pablo, personajes vívidos y entrañables que resuenan en los lectores por su familiaridad y cercanía.
Nuestra parte de noche es una lectura inmersiva, de la que no resulta fácil despegarse. Espanta y a la vez atrae con esa curiosidad morbosa de observar algo que sabemos prohibido. Es un descenso a la oscuridad, de la historia argentina, del ser humano, de lo que permanece oculto en cada uno de nosotros.
Ficha técnica: Nuestra parte de noche
Autora: Mariana Enríquez
Año de publicación: 2019
Género: Ficción literaria
Páginas: 680
Editorial: Anagrama
Colección: Narrativas hispánicas