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She's Gotta have it: atemporalidad y amor romántico.

Por Jazmín Keller


En un contexto mundial hostil de posguerra y bombardeos informáticos con la figura del espía a la cabeza, se estrena She's gotta have it el 8 de agosto de 1986, escrita y dirigida por Spike Lee. Este filme toma su lugar con un reparto completamente afroamericano en plena lucha por los derechos de las personas racializadas y el surgimiento de la segunda ola feminista. En 84 minutos, casi completamente en blanco y negro, Lee utiliza fotografías que intervienen la cinta y nos presenta los rincones artísticos que moldean el barrio de Brooklyn. La estética es delicada, con planos detalle y el juego finito de valores de la paleta acromática que logran capturan intimidad: la capa delgada de sudor después del orgasmo o el efecto de una caricia en el cuerpo. En 2017, el director trajo nuevamente a Nola Darling y estrenó la serie She's gotta have it en coproducción con Netflix. Según la crítica, volvió a posicionarse como heroína feminista con rasgos de la cosmovisión actual.


El argumento se centra en Nola Darling (Tracy Camilla Johns), artista de Brooklyn a la que no le simpatizan las etiquetas y mantiene una relación poliamorosa con tres amantes: Jamie Overstreet (Tommy Redmond Hicks) con quien forma un lazo emocional importante, Greer Childs (John Canada Terrell) un modelo vanidoso contrapuesto al resto de los personajes y Mars Blackmon (Spike Lee) fanático de los Knicks que gana por su simpatía. Todos los perfiles son muy distintos, casi complementarios. Con ellos, Nola no sólo explora su sexualidad, sino que construye relaciones distintas con cada uno, que van desde la satisfacción inmediata hasta el amor romántico que adolece desenfrenado y confuso.



A lo largo de la película, se desarrollan distintos conflictos entre los personajes, principalmente celos de los amantes que no entienden cómo se pueden mantenen relaciones sexoafectivas en simultáneo. Como si esto significase que no logran complacer las necesidades de su chica, se sienten vulnerados e intentan que Nola deje al resto de sus amantes mientras se empiezan a sumergir en la relación poliamorosa para complacerla.


En esta cinta no hay nada azaroso, todos los movimientos son una manifestación militante y eso es claro. La primera impresión es de goce por ver una película que cuenta la historia de una mujer que habita el deseo y decide prevalecer. La figura de Nola, la crítica a las relaciones monógamas y el activismo racial podrían considerarse el grito final de la película pero lo novedoso está en la construcción de los personajes varones y cómo deja al descubierto los rasgos de la virilidad estándar, posesiva y muchas veces mal intencionada. Con este primer largometraje, Spike Lee conserva la relevancia con una heroína feminista en constante búsqueda y exponiendo las hilachas de las masculinidades tóxicas y su fragilidad.




Ficha técnica: She's gotta have it.

  • Año: 1986

  • Duración: 84 min.

  • País: Estados Unidos.

  • Dirección y guión: Spike Lee.

  • Música: Bill Lee.

  • Reparto: Tracy Camilla Johns, Tommy Redmond Hicks, John Canada Terrell, Spike Lee, Raye Dowell, Joie Lee y Sharon Epatha Merkerson

  • Fotografía: Ernest Dickerson

  • Productora: 40 Acres y A Mule Filmworks.

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